Preparación

• Paso 1 - Masa Comenzá con la margarina pomada, que debe estar blanda. En un bowl, agrega la margarina y el azúcar, y formá un arenado con batidores.
• Paso 2 Añadí el huevo y la harina previamente tamizada para evitar grumos. Este paso es esencial para la textura de la masa.
• Paso 3 Agrega la ralladura de limón para dar aroma a la masa de la tarta de ricota. Mezcla todos los ingredientes minuciosamente.
• Paso 4 Una vez que todos los ingredientes estén integrados, dejá reposar la masa en la heladera mientras te concentras en el relleno.
• Paso 5 - Relleno Coloca la ricota en un bowl y agrega el huevo, el azúcar y una generosa cantidad de ralladura de limón. Usá una batidora para lograr un relleno suave y sedoso.
• Paso 6 El segundo truco clave es agregar una cucharada de fécula de maíz tamizada al relleno. Mezclá bien para que se integre completamente. Esto aportará la textura perfecta.
• Paso 7 - Masa Estirar la masa de la tarta sobre la tartera o el molde que vayas a utilizar. Asegurate de cubrir todo el fondo y los bordes.
• Paso 8 - Relleno Vertí el relleno de ricota sobre la masa. Mové la tartera suavemente para que el relleno se distribuya uniformemente. Asegurá un repulgue adecuado para evitar derrames.
• Paso 9 Hornea la tarta de ricota a 180°C o a una temperatura ligeramente inferior. Este es un truco fundamental para lograr una textura suave en el interior y una superficie crocante por fuera. La temperatura del horno es crucial.
• Paso 10 Una vez horneada, decora la tarta de ricota a tu gusto. Podés espolvorear azúcar impalpable por encima o añadir rodajas de limón. Serví y disfrutá de este delicioso postre.